Sin defensa es imposible. 1-2.

     Otra vez vuelven a volar los puntos del Ramón Sánchez Pizjuán. Esta vez, con mejor imagen que la mostrada en anteriores citas en casa, pero con resultado (que es lo importante) similar a tres de los últimos cuatro encuentros, este sería el cuarto de cinco.

     Vi en la noche de ayer, desde el minuto diez al setenta y cinco, aproximadamente, un Sevilla dominador, que lo intentaba una y otra vez, que llegaba, que remataba aunque sin fortuna, que hacía del toque y de los pases su mejor arma, con un Romaric grandisimo en los pases... pero los puntos se los llevaron los catalanes. Y ello es debido a la desaplicación defensiva de nuestro equipo, de los momentos de caraja del Sevilla, bajo mi punto de vista ninguno de los goles hubiera subido al marcador de estar concentrados.

     Me gustó mucho mi equipo en la primera mitad, a excepción de los primeros diez minutos, que el partido fué controlado por los periquitos. En ningún momento, hasta el minuto 78, me dió la sensación de que volarían los puntos de Sevilla a Barcelona, ni aún cuando en el minuto 41 cuando Callejón se inventa un buen gol y adelantaba a su equipo.

Fuente: Estadio Deportivo

     El primer gol espanyolista se produce por un pase desde nuestra banda derecha hacia dentro del área donde entra el jugador periquito completamente sólo y tirándose coloca el balón lejos de las posibilidades de Javi Varas. La jugada bajó el termómetro de los aficionados en una noche tan fría.

     Al descanso se llegó con el resultado de 0-1. Tras los quince minutos de parón, el Sevilla mantuvo la misma tónica que en la primera parte, presionando, tocando, disfrutando de ocasiones (que un buen Kameni se encargó de desbaratar) y totalmente entregado en la causa. Hasta el minuto 75 aproximadamente. Ahí mi equipo se hunde, pierde la intensidad, pierde el toque perdiendo otra vez en la salida de balón y dejando de dueño y señor del partido al Espanyol.

     El 0-2 llegaría en el minuto 78, tras una falta rápida sacada por los visitantes, donde TODA nuestra defensa se queda mirando cómo el balón los supera por alto. Tras ser superados, Escudé intenta llegar al corte pero es demasiado tarde, Callejón ya batía a un Javi Varas completamente sólo por el primer palo. Desconcentración absoluta de mi equipo en una jugada que como dice Manzano, no le puede suceder a un conjunto de primera división.

     En el minuto 90, Negredo volvería a anotar para el Sevilla F.C., con un remate desde el borde del área que colocaría en las mismísimas escuadras tras pase de Capel. Lástima que dicha jugada sólo pudiera maquillar un resultado que se me antoja injusto, según lo expuesto por uno y otro equipo en el cesped del Sánchez Pizjuán.

     Bien nos vendría aplicarnos más en defensa porque es complicado aspirar a conseguir los objetivos recibiendo tantos goles en contra. Quizás, quien sabe, no es un medio centro lo que tan imperiosamente le hace falta a este equipo...