Una vez eliminados por el Oporto, jugando el segundo encuentro en el estadio del conjunto portugués, ganando el partido 0-1 y metiendole el miedo en el cuerpo a los aficionados locales tras el sensacional partido jugado por mi equipo, ya sólo nos queda la liga.
Este fin de semana hemos empatado contra el Atlético de Madrid, 2-2, un resultado no muy malo en un estadio siempre muy hostil para el conjunto sevillista. Siempre adelantándonos en el marcador, muy buen partido de los mios y muy bien plantados en el campo. Pero la dinamita del conjunto colchonero es innegable, y quedaron neutralizados los intentos de victoria del Sevilla F.C., pero cuando no se puede ganar... bueno es el empate.
Esta semana, el Sporting de Gijón, buen partido para comenzar a despegar de una vez por todas.
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